Una vaca es un animal importante en la granja. Al ser un animal sagrado en algunas culturas, las vacas se usan activamente en otras principalmente para la leche y la carne. En este sentido, el criador debe saber no solo cómo cuidar a la vaca en la granja, sino también cómo comportarse si el animal se enferma. Una de las enfermedades más comunes y peligrosas es la viruela de las vacas.

¿Qué es esta enfermedad?

La viruela es una enfermedad infecciosa caracterizada por el debilitamiento del animal, un aumento significativo de la temperatura corporal y la aparición de úlceras y crecimientos en la ubre.

La viruela en las vacas puede ser causada por dos cepas: genuina o virus puro (Ortopoxvirus de la vaca) y vacuna (Ortopoxvirus de la vacuna). La infección con la primera cepa es extremadamente rara hoy en día, mientras que la segunda infección ocurre principalmente durante la vacunación del personal de la granja y se transmite a las vacas de las siguientes maneras:

• contacto (cuando una lechera toca a un animal a través de un epitelio pelado);
• en el aire (a través de la descarga de las áreas oral y nasal);
• transmisible (picaduras de roedores e insectos);
• alimentario (a través de las heces).

Importante! Además de la ubre, las úlceras y los crecimientos también pueden cubrir las caderas, la espalda, la cabeza y el cuello.

La falta de vitaminas en el cuerpo también puede ser un factor que contribuye a la infección y al desarrollo de la enfermedad, especialmente en el invierno. La enfermedad se caracteriza por un contagio extremo: un animal enfermo puede infectar a todo el ganado. La infección también puede ocurrir después de la interacción de las vacas con alimentos, agua o instrumentos infectados con esporas de viruela.

Causas del ganado

Puede haber varias razones para la aparición de la viruela, y todas ellas están directamente relacionadas con las condiciones de las vacas:

• falta de vitaminas debido a la mala calidad y / o desnutrición;
• establo mal ventilado;
• falta de aireación regular;
• suciedad en el puesto, heno que no cambia por mucho tiempo;
• alta humedad en el puesto;
• incumplimiento del régimen de temperatura.

Importante! Una forma de reducir la posibilidad de infección durante el período de vacunación es seguir las reglas de higiene personal.

Síntomas y curso de la enfermedad.

La viruela se desarrolla lo suficientemente rápido, y los siguientes síntomas son inherentes:

• un aumento significativo en la temperatura corporal del animal (hasta 40–41 grados centígrados);
• debilidad general, pérdida de apetito;
• disminución en la producción de leche;
• falta de voluntad de una vaca para permitir que una persona ordeñe;
• la aparición en la ubre de pápulas, que con el tiempo se convierten en abscesos y grietas;
• "Posición amplia": el animal está tratando de maximizar las extremidades posteriores.

El período de incubación de la viruela de la vaca varía de tres días a dos semanas. Después de este período, aparece una erupción (pústulas) en la ubre. Exteriormente, parecen tubérculos con hematomas y depresiones internas claramente visibles. De siete a diez días después, las pústulas maduran y explotan, fusionándose en una mancha marrón. Paralelamente a las manifestaciones externas, se producen hemorragias internas en el cuerpo.

El animal se debilita cada vez más, se niega a comer y ordeña, tratando de colocar sus patas traseras lo más ampliamente posible. Un aumento de la temperatura causa fiebre. Posibles complicaciones en forma de temblor y daño al sistema respiratorio.

Sabes Una persona también puede contraer viruela de las vacas, pero después del primer caso de infección, el cuerpo desarrolla inmunidad.

Diagnósticos

La inspección visual juega un papel importante en el diagnóstico de esta enfermedad. Sin embargo, algunas manifestaciones externas de la enfermedad, en particular una erupción cutánea, pueden ser un síntoma de otras dolencias.

En este sentido, para diagnosticar la enfermedad en un animal, se toma una muestra de líquido de la erupción para pruebas de laboratorio: tinción, pruebas biológicas en embriones de pollo y conejos. La autopsia del ganado recientemente muerto desempeña un papel igualmente importante en el diagnóstico de la enfermedad. En cualquier caso, debe contactar a su veterinario.

Importante! Si la enfermedad se manifiesta en un animal adquirido recientemente, es necesario obtener información del vendedor sobre los casos de viruela en la ubicación anterior de la vaca.

Cambios patológicos

El principal cambio patológico durante la enfermedad es la aparición de una erupción que gradualmente forma grandes manchas marrones en la ubre. A medida que se desarrolla la enfermedad, las manchas se secan y se forma una costra en su lugar, que puede agrietarse, lo que le da a la vaca molestias y dolor adicionales.

Las manifestaciones internas se caracterizan por hemorragias en el cuerpo y abscesos. La enfermedad también puede causar complicaciones en forma de úlceras y mastitis, lo que complica enormemente el ordeño. Cuando se infecta con una cepa de viruela de génova, los tejidos se dañan mucho más profundamente y, por lo tanto, la erupción no parece tubérculos, sino pequeñas manchas oscuras.

Cómo y cómo tratar

Una vez que una vaca ha sido diagnosticada con viruela, puede comenzar a tratarla.

Recomendaciones generales

El tratamiento en sí debe llevarse a cabo bajo la supervisión de un veterinario, ya que el médico podrá elegir los medicamentos más adecuados, así como monitorear el proceso de tratamiento y ajustarlo si es necesario. Sin embargo, vale la pena llevar a cabo una serie de actividades que contribuirán al tratamiento:

• aislamiento de un animal enfermo para que no infecte al resto del ganado;
• desinfección en el granero y su ventilación regular;
• transferencia a la alimentación de mezclas líquidas y exclusión de alimentos de baja calidad;
• mantener la sequedad para evitar la supuración;
• ordeño diario de la vaca para prevenir la formación de mastitis (se recomiendan catéteres especiales).

Tratamiento de drogas

La base para el tratamiento de la viruela es la medicación, tanto externa como intravenosa (principalmente antibióticos). Estos incluyen:

• ungüentos antivirales 2-3 veces al día - Florenal (0.5%), Oxolinic (3%), lactato de ectaridina (3%), Tebrofenova (5%) durante catorce días;
• 2 veces al día - Metisazon (0.6 g) cinco a seis días;
• 2 veces al día: inmunoglobulina anti-veneno (0.3-0.6 g) durante cinco a seis días.

Qué antibióticos usar depende de las características individuales del animal enfermo. No existe un antibiótico universal, por lo tanto, el veterinario prescribe el tratamiento individualmente, dependiendo del organismo de una vaca en particular y la etapa de la enfermedad.

Importante! Al elegir medicamentos, asegúrese de consultar a un médico.

¿Puedo tomar leche de animales enfermos?

Las opiniones sobre si se puede comer leche de vacas con viruela difieren. Algunos agricultores creen que la leche puede desinfectarse por ebullición o pasteurización y luego ser apta para el consumo, mientras que otros argumentan que la leche de animales enfermos debe desecharse. La segunda opción es preferible, ya que cualquier daño potencial a la salud debe ser excluido.

Vacuna contra la viruela

Las vacunas contra la viruela para vacas vienen en dos formas: por separado para cada cepa. Sin embargo, el efecto de las vacunas varía: la vacunación contra una cepa de viruela se lleva a cabo una vez y proporciona inmunidad de por vida, mientras que la vacunación contra una cepa de viruela mixta proporciona inmunidad durante solo unos pocos meses, después de lo cual es necesaria la vacunación repetida.

Sabes La vacuna contra la viruela fue inventada por casualidad. En 1796, un joven doctor Edward Jenner, mientras estaba en una granja, notó que las lecheras que estaban en contacto con vacas de viruela desarrollaron una inmunidad de lechera a la enfermedad. El médico realizó un experimento introduciendo una cepa de virus de un animal enfermo a una persona, y así abrió la vacuna.

Otras medidas preventivas

Además de vacunar al ganado, la prevención de enfermedades se puede llevar a cabo de otras maneras:

• monitoreo de la agricultura cercana para la viruela;
• controlar la limpieza de alimentos, agua y equipos;
• mantener a los animales recién adquiridos separados del resto del rebaño durante el primer mes y medio;
• tratamiento de la ubre con antisépticos;
• cumplimiento de la higiene personal;
• vacunación regular del personal contra la viruela, después de lo cual los vacunados no tienen permitido el ganado durante catorce días;
• aislamiento de un animal enfermo del resto del rebaño para evitar una mayor propagación de la infección;
• utilización de leche recibida de vacas enfermas.

La viruela es una enfermedad común y peligrosa si no se trata. La mejor manera de lidiar con esto es mantener el establo limpio, monitorear a los animales y al personal para detectar infecciones, y consultar a un veterinario si el animal está enfermo.